En lo que se refiere a la conducta sexual o sexualidad existen diferentes valores éticos que se deben tener en cuenta y que forman parte de la vida de las personas que buscan tener relaciones. Entre los valores existentes en cualquier relación íntima se deben tener en cuenta:
- Responsabilidad: Una persona debe ser consciente de las consecuencias que pueden tener sus decisiones en el ámbito sexual, como es el caso de la «paternidad responsable», debiendo tomar las medidas de precaución oportunas para evitar que puedan darse situaciones indeseadas como el embarazo. Se debe pensar en las relaciones sexuales de una forma racional, no tanto por instinto, y protegerse de la forma adecuada.
- Compromiso: En este punto hay personas que sí tienen compromiso con la otra persona mientras que otras prefieren llevar a cabo relaciones sexuales de forma ocasional sin compromiso, algo que hay quién ve como una contradicción a la dignidad de la persona.
- Respeto: Por respeto se entiende la dignidad de las personas a la hora de llevar a cabo la práctica sexual, perdiéndose el mismo en aquel momento en el que se produce una violación o un acoso sexual, dos circunstancias que, por desgracia, se dan con frecuencia en el mundo actual.
- Dignidad: La dignidad es un valor fundamental en toda relación íntima debiendo respetar a la otra persona y no confundir su naturaleza con la de, por ejemplo, un animal.
- Libertad: Ambas personas dentro de una relación sexual deben tener la libertad suficiente para poder tomar sus propias decisiones, debiendo tener en cuenta las consecuencias que puede tener que no se realice el acto con libertad y actuar en consecuencia.
- Sinceridad: En las relaciones íntimas llevadas a cabo en una pareja debe haber una comunicación sincera y abierta, haciendo que la otra persona conozca y respete sus opiniones y característica, si bien en las relaciones esporádicas a muchas personas no les importa el no conocerse.
- Fidelidad: Este valor se asocia principalmente a las relaciones permanentes y en las que ambos integrantes de la pareja aseguran tener respeto por la otra persona, evitando el contacto sexual o íntimo con otras personas, apostando por la monogamia.
Asimismo existen diferentes tipos de relaciones más allá de la monogamia entre un hombre y una mujer o personas del mismo sexo, como es el caso del Poliamor, un neologismo que significa que se puedan mantener relaciones íntimas simultáneas y duraderas con varias personas con el consentimiento y conocimiento de todas ellas.
No obstante, dentro del Poliamor hay diferentes tipos, siendo la figura más frecuente la de los poliamorosos solteros, personas que no tienen una pareja fija ni están casadas, que no quieren la exclusividad de una persona para ellos y que tampoco están dispuestos a ofrecerla a ninguna, pero que sí quieren respecto y honestidad. Muchos solteros recurren a servicios profesionales como http://geisha.academy/santiago/, donde pueden disfrutar de momentos de auténtico placer con scorts capaces de cumplir sus sueños.
Asimismo existen otros tipos de Poliamor como la polifidelidad, las parejas abiertas, las parejas primarias o los grupos abiertos.
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